Se estima que la producción de cereales en la UE alcance 300 millones de toneladas, lo que supondrá una cosecha ligeramente inferior a la de 2014/15, que fue récord, pero que se sitúa entre las mejores de los últimos diez años.
Debido a las buenas cosechas mundiales y a los precios relativamente bajos, se considera que las exportaciones europeas de cereales serán inferiores a las de 2014/2015.