Con la floración de cultivos como el melocotón, nectarina, duraznos, cerezas, ciruelas, albaricoques y almendras. Llega el momento de comenzar con las aplicaciones preventivas contra enfermedades como la Monilia, evitando así daños severos en la producción.
La podredumbre parda o Monilia es una enfermedad aérea causada por dos patógenos: Monilinia laxa y Monilinia fructígena. Dicha enfermedad ataca a frutales en condiciones de lluvias durante la floración y en maduración de fruto. La enfermedad afecta a cultivos como: melocotón, nectarina, duraznos, cerezas, ciruelas, albaricoques y almendras con aproximadamente la misma severidad.
Los daños se dan principalmente en la fruta en el árbol, pero las pérdidas más graves son en el transporte y comercialización de la cosecha. El rendimiento de los cultivos se ve reducido debido a la destrucción de flores a causa de la enfermedad.
En condiciones de alta incidencia se pueden producir pérdidas del 50-75% de la cosecha, sin incluir aquellas que se dan en la comercialización de la fruta.
Como medidas preventivas se debe eliminar lo antes posible aquellas flores y ramas afectadas, reduciendo así el inóculo del patógeno disponible, que producirá las infecciones de frutas más adelante en la temporada o se quedará en forma latente en la hibernación (Inóculo para la próxima campaña).
El control de la enfermedad debe de iniciarse con tratamientos en el momento en que florecen los capullos (mostrándose rosados) hasta la caída de los pétalos. La elección de un fungicida que controle la enfermedad, pero que a la vez pueda aplicarse en los momentos críticos del cultivo como es la maduración del fruto es esencial. En condiciones de elevada incidencia de la enfermedad el control de Monilia es complicado.
La aplicación de BIOCLEAN®️ LKE consigue óptimos resultados en el control de esta enfermedad en condiciones de alta incidencia, consiguiendo un 100% de inhibición del patógeno en ensayos in vitro. La acción conjunta con TRICHOBOT®️ potencia sus resultados. Además, ambos productos se pueden aplicar en floración sin causar abortos o daños en flores.
En ensayos realizados en campo con estos dos formulado en el cultivo de la nectarina, conseguimos reducir el porcentaje de frutos afectados a los 10 días desde recolección en un 49,09% en el caso de BIOCLEAN LKE y un 54,55% con TRICHOBOT.
El diseño de una estrategia integral permite conseguir niveles de reducción de daños significativos. Tanto BIOCLEAN®️ LKE como TRICHOBOT®️ son productos aptos para agricultura ecológica que no dejan residuos en la cosecha y con efectos directos en el desarrollo de Monilia en postcosecha.